martes, 26 de febrero de 2008

Lucha de dos en el PAN

Ricardo Morales Sánchez - Serpientes y Escaleras

    

Mientras en el PRI las cosas parecen complicarse por el gran número de aspirantes a la candidatura a la gubernatura, en Acción Nacional las cosas parecen despejarse y es que todo indica que a la final sólo llegarán dos contrincantes, Rafael Moreno Valle Rosas y Humberto Aguilar Coronado.

 

Como están las cosas en el interior del panismo, la lucha muy posiblemente se centrará en estas dos figuras que, ya desde hoy, se disputan el apoyo de los principales cuadros de su partido, sabedores de que el que logre los mejores amarres será sin duda el que se quede con la candidatura.

 

No es casual que al informe de labores que rindió el sábado pasado, Francisco Fraile García, uno de los asistentes haya sido Rafael Moreno Valle Rosas, la lectura inequívoca de la presencia del legislador expriista es que al parecer el pastor ya tiene candidato a la gubernatura.

 

De ahí también que haya sido notoria la ausencia de Ana Teresa Aranda, del propio “Tigre” Humberto Aguilar y de Ángel Alonso Díaz Caneja.

 

Para equilibrar la balanza Humberto Aguilar ha puesto a trabajar a dos de sus principales operadores que recorren todo el estado en busca de apoyos para el senador egresado de la UPAEP.

 

Tanto Pedro Gutiérrez como “El Chango” Carmona están de tiempo completo en la tarea de operar a favor de Aguilar Coronado, quien por todos los medios también busca tener de su lado a Ana Teresa Aranda, con la cual ha tenido diversos acercamientos.

 

Ángel Alonso Díaz Caneja está consciente de que sus canicas no le alcanzan para competir por la candidatura a la gubernatura. Sin embargo, sabe perfectamente que su capital puede inclinar la balanza a favor de uno de los lados, por eso espera para ver quién da más.

 

 

Zavala y el obispo Chedraoui

 Tal y como lo anunció el columnista Rodolfo Ruiz Rodríguez, el pasado viernes en el restaurante Lobnan de la ciudad de México, por cierto especializado en comida libanesa, se reunieron a comer, Javier López Zavala y el influyente obispo de la Iglesia ortodoxa griega, Antonio Chedraoui.

 

La reunión no pudo ser en mejores términos, para envidia de quienes aún ven mal al exsecretario de Gobernación.

 

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